Las chicas son
como las manzanas de los
árboles. Las mejores están en la
copa del árbol. Los chicos no quieren
alcanzar las buenas por miedo a caer
y lastimarse. En su lugar, simplemente
cogen las manzanas podridas del suelo
que no son tan buenas, pero son fáciles.
Así que las manzanas de la copa creen
que les pasa algo, cuando en realidad,
son increíbles. Sólo tienen que esperar
que se acerque el chico adecuado,
el suficientemente valiente
como las manzanas de los
árboles. Las mejores están en la
copa del árbol. Los chicos no quieren
alcanzar las buenas por miedo a caer
y lastimarse. En su lugar, simplemente
cogen las manzanas podridas del suelo
que no son tan buenas, pero son fáciles.
Así que las manzanas de la copa creen
que les pasa algo, cuando en realidad,
son increíbles. Sólo tienen que esperar
que se acerque el chico adecuado,
el suficientemente valiente
para trepar
todo el camino
hasta la cima
de el árbol.
todo el camino
hasta la cima
de el árbol.
Pues como tengan que esperar a ser descubiertas por algún valiente que tenga el valor y las cualidades necesarias para llegar hasta ellas, ya pueden esperar sentadas, las pobres... No hay hombre con esas cualidades. Si lo buscaran cobarde, mentiroso y aprovechado, todavía...
